Con el paso del tiempo se van acumulando en casa objetos que dejan de ser útiles o que nunca lo fueron. Hace un par de años compré unos marcos pero nunca llegaron a estar colgados ni a contener ninguna foto. Por casualidad encontré unas láminas de pájaros. Preciosos colibrís volando entre flores y vegetación. Las tres forman parte de una colección de fauna. Los originales son muy antiguos, mis láminas son copias, claro está, pero siguen siendo muy bonitas.
Como veréis, los tres marcos son distintos tanto en tamaño como en modelo y son bastante más grandes que las láminas. Solución: encargar un paspartú para cada lámina. El cristalero al que le llevo mis trabajos me cortó tres al tamaño justo y del color más adecuado para cada dibujo. Aquí tenéis el resultado.
Tengo otra lámina muy curiosa y antigua que perteneció a una colección de botánica de un laboratorio farmacéutico. Por suerte tengo otro marco sin uso y creo que de tamaño muy parecido al de la lámina. En cuanto tenga fotos os lo enseño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario