Hace unas semanas os mostré mis láminas de colibrís y cómo se pueden reutilizar marcos de fotos que ya no se usan. Os adelanté que tenía una lámina antigua de rosas. Pertenece a una colección que lanzó el laboratorio farmacéutico Casen. No sé en que año exactamente pero llevaba mucho tiempo colgada en casa de la abuela Carmen. El marco estaba olvidado por mi casa y tiene la misma medida que la lámina.
Todavía no he encontrado su lugar definitivo así que por el momento está apoyado en un baúl que hace de mesilla.
Aprovecho para presentaros al señor y la señora conejo. Me encantan los muñecos de trapo con aspecto antiguo. Cuando tenga tiempo creo que probaré a hacer alguno.
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